Prácticas enológicas patrimoniales del Biobío: envejecimiento en barricas de maderas nativas como herramienta de diferenciación para los vinos finos de la región

Objetivo general

Establecer una diferenciación, tanto comercial como técnica, de los vinos finos producidos en la región del Bio Bio mediante su envejecimiento en barricas y duelas fabricadas con maderas nativas.

Objetivos específicos

Desarrollar y probar barricas de maderas nativas para envejecimiento de vinosDesarrollar y probar alternativas de maderas nativas(duelas, chips, cubos) para la envejecimiento en estanques de ac. InoxidableComparar los resultados químicos y organolépticos con barricas y chips convencionalesPuesta en mercado de los prototipos

Descripción

Los vinos Chilenos son relativamente uniformes, basados en pocas variedades, suelos y climas; con técnicas de vinificación y guarda bastante estándar. Esto representa un problema competitivo para cualquier vina, pero es especialmente complicado para los productores pequenos, para quienes su visibilidad ante los consumidores es difícil o casi imposible. De la misma manera los vinos de Chile, en general, carecen de una identidad territorial, especialmente en cuanto a las prácticas enológicas.La tonelería tradicional chilena se basa en el uso de maderas como el roble chileno (nothofagus obliqua) y el Rauli (nothofagus Alpina) los cuales fueron utilizados desde la colonia para la fermentación, guarda y transporte de vinos. Los depósitos tenían capacidad desde los 300 a los 20.000 litros.En los 80 el uso de maderas nativas en los grandes depósitos fue reemplazado por el acero inoxidable, aludiéndose a problemas de higiene y conservación de los vinos; todos problemas derivados del deterioro y falta de mantención y renovación de estos depósitos. El uso de barricas de 300 litros también fue abandonado excepto en regiones más aisladas como el valle del Biobío, en las comunas de Yumbel, Laja y San Rosendo, donde se emplean hasta el día de hoy.Desde los anos 80 el uso de barricas de roble, sea americano o francés, se ha masificado en la industria vitivinícola chilena, principalmente con el objetivo de hacer productos más comerciales. No obstante el uso de maderas francesas o americanas tiende a uniformar los vinos si solo se apela al aporte de compuestos aromáticos y de sabor al vino.Actualmente el mercado de vinos de alta gama demanda vinos con mayor identidad regional, que sean claramente referidos a un territorio e idealmente a un terroir. Uno de los factores determinantes en la diferenciación de los vinos de alta gama es el tipo de madera que se utiliza en su envejecimiento.La valoración de las prácticas enológicas autóctonas y ancestrales es una tendencia global y representa la oportunidad de poner en valor el patrimonio regional del Biobío.Si bien se ha desarrollado experiencias con chips de maderas nativas en el país, no se ha publicado resultados de estas experiencias en vinos reales como tampoco se ha evaluado los resultados de estas maderas en forma de barricas, donde el aporte no es exclusivamente a través de la cesión de aromas de las maderas, sino también a través de una combinación de estos efectos con el aporte de oxígeno en pequenas cantidades que depende de la porosidad de la madera y que determina la polimerización de los taninos y antocianas de cada vino.Esta propuesta pretende desarrollar, fabricar y evaluar barricas de maderas nativas en la guarda de vinos producidos en la región del Biobío Los ensayos se realizaran en las instalaciones de Vinas inéditas, utilizando técnicas de vinificaciones ancestrales mejoradas y sistemas de construcción de barricas acordes a las exigencias de los mercados de vinos de alta gama. Así mismo se evaluara el envejecimiento de vinos en presencia de duelas de maderas nativas. El uso de maderas nativas permitirá diferenciar los vinos de la región del Biobío frente a la competencia local e internacional, logrando posicionarlos como vinos ligados al territorio y la cultura regional.