La propuesta consiste en el desarrollo de un prototipo de bebida saludable 100% vegetal, de fácil consumo, con propiedades nutricionales altamente beneficiosas para la salud y que ofrece al mercado una nueva alternativa alimenticia. La elaboración y comercialización de este producto no sólo tendrá un impacto socio-cultural positivo en lo que se refiere al cuidado de la salud, sino que también en el desarrollo de nuevas alternativas de producción para la agricultura familiar campesina local. Este producto podría ser una alternativa a los jugos concentrados y a las actuales bebidas vegetales como el caso de la soya. Para ello, se utilizarán las semillas de quínoa y berries, tales como el arándano, la frambuesa, la frutilla y el maqui, en la formulación de los productos. La elaboración y comercialización de este producto tendrá un impacto económico y socio-cultural positivo, tanto para los ingresos de jefas de hogar productoras de berries y quínoa, como en el cuidado de la salud de la población.