Modelo de turismo enológico, como complemento a la actividad vitivinícola, para mejorar la competitividad y la rentabilidad de la Red del Vino de Colchagua. En base a los principios sociales y ambientales de la certificación Fair Trade.

Recopilación de la información históricocultural relacionada con las 19 familias agrícolas que conformar la Red de Vino de Colchagu E inventariado de la avifauna y la botánica del Ecosistema de PeralilloGeneración de programas turísticos adaptados a la demanda específica de los clientesDesarrollo de una plataforma virtual, como complemento a la actividad turísticDiseno e implementación de la infraestructura para mejorar la atención al client;Establecimiento de un modelo de gestión para el desarrollo del programa turístico, con la participación de todos los actores involucrados, a modo de mejorar el servicio turístico.Desarrollo e implementación de un modelo de promoción de los servicios y productos generados en el proyecto, aprovechando el contexto turístico de Colchagu

En los últimos anos el valle de Colchagua ha sido beneficiario de los programas de difusión, cuyo objetivo ha sido la difusión del producto vinícola a nivel nacional e internacional. Fruto de ello, ha provocado que la oferta recreativa para conocer el producto se haya mejorado respecto a las opciones que ya existen. Y por tanto los servicios turísticos de las actuales vinas que operan en el valle, se centran en el posicionamiento de sus marcas en la región.La oferta turística de la actual ruta del vino, se basa en la realización de una serie de actividades por parte del turista, en las que realiza una breve visita a los vinedos, las bodegas y finalmente disfruta de una degustación del producto vino. Por tanto, se observa la ausencia de un nicho de conocimiento en la inducción al turista, basado en las diferentes labores agrícolas de las vinas. Además, no se detecta ninguna interacción del turista con el proceso vitícola y la identidad sociocultural de estos Valles. En definitiva, este tipo de servicios no presentan una experiencia o vivencia que permita al turista identificarse con el producto, y sobre todo, el poder conocer de primera mano el proceso vitivinícola.Es por ello, que a través del proyecto, 'Desarrollo de una Estrategia para la Generación de un Nuevo Modelo de Negocios de Turismo Enológico, como Complemento a la Pequena Producción Vitivinícola con certificación fair trade'. Se fomentará el conocimiento y el posicionamiento de la marca en la región. Esta idea de proyecto surge, a través de la necesidades detectadas, de crear una alternativa más económica, a las actuales rutas del valle de Colchagua. Y de atraer a nuevos turistas interesados en vivir una experiencia histórica y sobre todo para cubrir la falta de servicios turísticos que muestren el proceso de manejo y recolección de uva, ya que el turismo actual de la Ruta del Vino, se centra en el producto enológico.En consecuencia a ello, surge la oportunidad y/o necesidad de establecer una nueva línea de negocio basada en el turismo enológico, con certificación Fair Trade. Para ofrecer al cliente, un servicio turístico, que respete la autenticidad sociocultural de las comunidades del Valle de Colchagua y conserve los activos arquitectónicos y tradicionales, que dan un uso óptimo a los recursos ambientales, manteniendo los procesos ecológicos esenciales que ayudan a conservar los recursos naturales. Así como la garantía de una actividad económica viable a largo plazo, entre las que se encuentra la oportunidad de empleo estable y obtención de ingresos y servicios sociales, para las 19 familias de la Red del Vino de Colchagua.El resultado esperado es contar con un nuevo modelo de turismo enológico y potenciar la venta de vino con certificación Fair Trade. Posicionando la marca de la Red del Vino de Colchagua, como una de las pioneras en Chile, ya que actualmente es la única empresa de la VI Región, que produce vino, con producción propia de uva Fair Trade. Y poder replicar la experiencia de la Red del Vino de Colchagua, en diferentes rubros. Potenciando así, una pauta de consumo que involucre al consumidor, con el proceso productivo y el entorno del productor, siendo este último beneficiario de una nueva línea de negocio que contribuya al aumento de la competitividad y la rentabilidad de sus labores vitícolas.