Se desea tomar contacto con nuevas tecnologías que permitan ser aplicadas al país, tanto en explotaciones intensivas como extensivas. Al no existir en Chile explotaciones modernas, es indipensable visitar países donde la producción caprina se encuentra en niveles de gran desarrollo.El objetivo fundamental de esta gira es entegar a los crianceros de cabras porfesionales y técnicos de terreno que trabajan en programas de transfencia tecnológica, una visión integral de las posiblidades técnico-económicas de la producción de leche de cabra, en los ámbitos de las tecnologías de producción, la industrialización y el mercadeo de productos lácteos.

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La masa caprina nacional alcanza, en un ano promedio, a un nivel del orden de un millón de cabezas, encontrándose casi el 50 % de la dotación en las regiones ubicadas al norte de Santiago (IV y V). Las sequías que caracterizan esta área y la dinámica poblacional de la especie condicionan fuerte fluctuaciones en el tamano del rebano, las que se estiman en un rango entre 800.000 y 1.300.000 cabezas.La cabra ha demostrado una extraordinaria capacidad de adaptación a diferentes condiciones de clima, vegetación y manejo. Esta capacidad le ha permitido subsistir en los ambientes más desfavorables, en la mayoría de los casos a costa de los recursos naturales, no por ser danina por naturaleza, sino por ser explotada por el hombre en un número excesivo en relación a la productividad primaria del ecosistema. La presencia de la cabra en estos medios,donde otros animales domésticos no logran prosperar, ha fortalecido en muchos técnicos y productores la asociación de ella con la degradación de los recursos.Cada día hay un mayor número de evidencias de que la explotación racional de la cabra, no sólo es compatible con la conservación de los recursos naturales, sino que puede contribuir a mejorar la productividad y el valor económico de los campos de pastoreo. En la actualidad coexisten los sistemas de explotación más primitivos y aquellos que han derivado de distintos grados de tecnificación adoptados por el hombre.El principal producto de la explotación de la cabra~en Chile es el queso, elaborado en condiciones artesanales no sujeto a normas sanitarias, las que son cumplidas sólo por escasas industrias autorizadas legalmente. El segundo producto en importancia es el cabrito, el que se comercializa entre septiembre y diciembre.Como resultado del conocimiento de la actual estructura productiva y de los análisis económicos practicados, se prevé que la producción lechera será incuestionablemente la mejor alternativa para los cliadores de cabra, para su posterior industrialización. El país cuenta con industrias lecheras de alto nivel técnico, dedicadas a procesar principalmente leche de vaca, pero interesadas en adquirir leche de cabra. Estas pueden desarrollar lineas de quesos destinados tanto al consumo nacional como a la exportación, especialmente debido a que los costos de producción de leche de cabra son ostensiblemente más bajos en Chile, comparado con países corno Francia, gran exportador de quesos. Cabesenalar que nuestra posición geográfica posibilita una complementación con la producción del hemisferio norte, ya que en éste, la mayor producción ocurre en el primer semestre del ano y en Chile en el segundo .En materia de producción de carne de cabrito, este rubro tendría interesantes posibilidades que se abren al país en el mercado internacional Estudios que se están realiz.~Uldo actualmente indican que existe una demanda selectiva por tarne de cabrito (3 a 5 kg. en vara) en los países de la Comunidad Emopea, de preferencia Italia y Grecia, donde se consumen como una delicatessen. También existe interés por esta carne en los Estados Unidos, Canadá y México. Se pagan precios CIF del orden de los US$S el kg. congelado de carne de cabrito.En los últimos anos se ha producido un favorable desarrollo del sector, desde el punto de vista de la evolución tecnológica de las explotaciones y de la incorporación de nuevas unidades de producción, sin embargo, estos avances son aún insuficientes para la potencialidad que se le atribuye al rubro en el país.