Aprender e incorporar soluciones innovadoras que permitan mejorar los sistemas productivos locales, basados en la sustentabilidad de los recursos naturales, conocer alternativas de autosuficiencia ante el fenómeno de la alta emigración desde los campos a las ciudades lo que implica además del desarraigo el aumento del desempleo y la escasa autonomía económica.

Las mujeres usuarias del convenio INDAP-PRODEMU provienen de diversos sectores de la provincia de Coyhaique y Aysén, esto enmarcado en la dispersión geográfica las expone a múltiples limitantes en cuanto al acceso a capacitaciones, conectividad, mercado para venta de productos, redes de apoyo participación e interacción con otras y otros productoras/es lo que imposibilita generar asociatividad. El desconocimiento de tecnologías agroecológicas apropiadas y replicables en la producción agropecuaria de la agricultura familiar campesina, la no visualización de los recursos agroalimentarios disponibles, la no valoración del potencial productivo existente, el desconocimiento del uso de energías renovables, sistemas de comercialización, etc. Hacen que la agricultura familiar campesina de la región de Aysén sea de muy bajo perfil productivo, se realiza en condiciones precarias y de gran esfuerzo humano. Toda esta realidad conlleva a que las actividades desarrolladas por las mujeres y ligadas al ámbito de la agricultura familiar, crianza de aves y artesanía se desarrollan a pequena escala y sin expectativas de crecimiento e innovación, provocando un estancamiento en el desarrollo del mundo campesino de la región de Aysén. Por lo tanto, si se tiene la oportunidad de conocer, aprender y replicar tecnologías limpias, agroecológicas de producción y procesos, entender sistemas de comercialización organizacionales exitosas y la valoración del patrimonio rural y agroalimentario, entonces se tiene una gran oportunidad de subir el nivel productivo, disminuyendo el sacrificio familiar y valorar el trabajo de la mujer campesina y sus familias en la región de Aysén.