Optimizar la productividad y período de oferta de flores para el cultivo de peonías, a través de técnicas de protección del cultivo, introducción de nuevas variedades y establecimiento de normas sanitarias, en la Región de La Araucanía.

Seleccionar nuevos cultivares de peonías por su productividad y vida en pos cosech; Ampliar la curva de producción de flores con técnicas de protección del cultivo (malla, túnel, ácido giberélico).; Definir estrategias de control para los principales problemas sanitarios (enfermedades, plagas y malezas) presentes en la región.; Transferir los resultados a los productores de peonías y sus asesores técnicos.

El cultivo de peonías se ha convertido en una interesante opción productiva tanto para agricultores como inversionistas que han visto en este rubro una alternativa para mejorar la rentabilidad de los cultivos agrícolas más tradicionales. Sin embargo, la actual oferta de peonía en Chile ha tenido serios problemas en su comercialización, debido a una sobre oferta de pocas variedades y a un corto período de oferta de ésta, lo cual ha influido en la rentabilidad del negocio y está debilitando la competitividad actual y futura del rubro. Por lo anteriormente senalado, con la generación de información técnica científicamente validada bajo las condiciones de cultivo de la región, se podrán determinar algunos factores productivos tales como: manejo sanitario (enfermedades, plagas y malezas), nuevas variedades más productivas y demandadas, ampliar la curva de producción, factores que permiten mejorar la actual oferta de flores para la exportación. Con esta información se podrán definir aquellas normas técnicas para la producción de peonías con la calidad que demanda el mercado y con la productividad que permitan hacer de este rubro una alternativa sustentable. Por las características de la peonía donde las plantas entran normalmente en producción al tercer ano de plantación y que además ésta va en aumento a medida que aumenta la edad de las plantas, algunos de los ensayos planificados en el proyecto inicial y que están en ejecución, alcanzaron a tener sólo 2 temporadas de evaluación. Incluso la primera correspondió al ano de establecimiento del cultivo, donde prácticamente no se pueden sacar conclusiones de los resultados ya que recién se empiezan a recuperar de todos los cambios fisiológicos que significa dividir una rizoma, cambiarlos de hemisferio, volver a plantarlos y desarrollar todo el sistema radicular que se destruye cuando se dividen. Es por ello, que para el caso de este tipo de especies perennes, se debieran considerar al menos 4 anos de estudio, de manera tal que los resultados tengan mayor validez y permitan emitir conclusiones más sólidas de los distintos estudios que se realizan para conocer mejor su comportamiento y respuesta a las distintas normas de manejo estudiadas. Lo anteriormente senalado justificó la solicitud de ampliar el período de evaluación de los ensayos implementados en una temporada más. Con ello se tendrá información técnica más consistente que pueda permitir hacer una buena difusión de los resultados, a través del Seminario, Manual técnico y Día de Campo, que se tendrán como resultados de este proyecto. Es necesario senalar que para el presente plan de continuidad se hizo una priorización de los ensayos que deberían continuarse, de acuerdo a los siguientes criterios: a) Donde se tendrían mayores impactos, b) Cuáles suscitan mayor interés por parte de los productores y en c) Cuáles faltaría una temporada más para poder obtener resultados validados y transferibles a los productores.