Ricardo Ariztía Tagle es gerente general de ATF Gestión/ Revista Redagrícola. marzo 2023 , pag. 26-30
24-abr-2023
Fuente y fotografía: Redagrícola
"Tuve la suerte de haber sido criado en el mundo agrícola y de formarme como ingeniero comercial, con un MBA, lo que me ha permitido juntar dos mundos. Esto facilita el manejo de fondos de inversión a una escala donde ser buen agricultor es el 'desde', a partir de lo cual se suma la mirada del reporting, finanzas, contabilidad y ESG [environmental social and governance; criterios sociales, ambientales y de gobernanza]. Se trata de un financiamiento que no va a llegar si no estás en esa cancha. En todo lo mencionado trabajamos juntos con José Miguel Fernández, socio en la gestora".
Ricardo Ariztía Tagle, gerente general de ATF Gestión.
CONTINUIDAD DE COSECHA DURANTE TODO EL AÑO
Si bien se han hecho plantaciones de cítricos con los fondos de inversión, estas especies se cultivaban ya de antes en los campos de la familia Ariztía en la zona: limones, desde la década de los 90 (actualmente variedades Fino 49, Eureka, Messina), luego vinieron naranjas a comienzos del nuevo siglo (Fukumoto, Lane Late), seguidas por clementinas (Clemenules) y mandarinas (W. Murcott) a partir del 2005. "Siempre focalizados en la RM -especifica el gerente-: María Pinto, Mallarauco, Isla de Maipo, Melipilla y Rapel, que se encuentra en O'Higgins, pero en verdad está en el límite de ambas zonas".
Además de cítricos, los frutales más importantes de esta gestora corresponden a palto, nogal y avellano europeo. Rubros como cereza y kiwi, entre otros, ocupan un lugar menor.
En la RM, hace 15 a 20 años, la selección de dichas especies frutales se debió a la conveniencia de dar continuidad laboral de cosecha (hoy este aspecto ha cambiado un poco), de sacar el máximo partido a las inversiones durante los 12 meses del año y de obtener ingresos constantemente para el flujo de caja.
"Partes cosechando limones en abril, continúas con Clemenules en junio, naranja en junio-julio, mandarina en agosto-septiembre, palta octubre a enero, un salto en febrero y nogal en marzo. En la RM es posible, pero no en todas las zonas".
Naranjas, clementinas y mandarinas se orientan a exportación; limones, a un mix con el mercado nacional. De las 5.000 ha administradas por ATF, aproximadamente, unas 1.500 se ubican en la RM; 400 corresponden a cítricos; en números aproximados, 150 ha de limones, 150 de mandarinas/clementinas, 100 de naranjas, con presencia de los tres en general en los predios. Hacia el sur predominan nogales y avellanos.
De aproximadamente 1.500 ha de ATF Gestión con frutales en la RM, alrededor de 400 son cítricos. En la foto se aprecia un molino de viento para control de heladas y, más atrás, un nodo de transmisión de datos.
CÍTRICOS RESISTEN LA SALINIDAD QUE IMPACTA SOBRE PALTO Y NOGAL
- ¿Cómo evoluciona la rentabilidad de los cítricos?
- "Voy a partir hablando de lo más estable: la naranja. Sus utilidades operacionales [ingresos menos costos de producción y gastos de operación] se ubican en torno a los 3.000-6.000 dólares por hectárea (US$/ha). La cifra es superada por varios otros cultivos, sin embargo en este caso las variaciones de un año a otro son menores. Nuestra mejor temporada ocurrió durante la pandemia, porque hubo mayor interés por la salud y por el aporte de vitamina C. La mandarina era la niña bonita, hasta hace 3 o 4 años, con US$1/kg de retorno a productor, hablábamos de utilidades operacionales del orden de US$15.000/ha. Hoy, pensando en promedios, se sitúa en unos US$0,6/kg; el negocio se ha acercado a los valores de la naranja".
-¿Con la Clemenules ha ocurrido lo mismo?
-"Sí, similar a la mandarina. Ojo, que se comportan de manera bastante distinta en las condiciones de Vicuña u Ovalle, por ejemplo. Respecto del limón, en los últimos tiempos los números de la exportación han estado flojos: US$0,30 a 0,40, cuando hubo temporadas de US$0,60-0,70. Sigo hablando en promedio, porque el precio de Japón es mucho mejor que el de EE.UU., por dar dos casos. Afortunadamente el mercado nacional ha estado afirmando los resultados. Nosotros enviamos al exterior aproximadamente un 60% y el 40% restante se comercializa acá. Ahora, ese 40% hay que dividirlo en dos, en verano e invierno. El 20% del verano supera los ingresos del limón exportado, en tanto que el fruto de invierno tiene un precio bajo, hemos llegado a tener que botarlo".
-¿Cómo ves la comparación de los cítricos respecto de nogal y palto?
-"En la región Metropolitana una variable que está afectando en muchas áreas corresponde al nivel de sales en el agua. La escasez de precipitaciones, la poca acumulación de nieve y el uso de aguas servidas de Santiago inciden en un alto contenido de cloro. La productividad de los paltos es muy sensible a este elemento y la de los nogales también, aunque en menor medida. Tenemos el clima y el suelo para ser buenos productores de paltas y nueces… De hecho, Melipilla es una zona extraordinaria para el nogal hasta que las sales empiezan a impactar. Si no tienes pozos con agua sin sales, en esas circunstancias hoy los cítricos son una opción económica mejor".
En los canales que abastecen de agua los campos administrados por ATF en Mallarauco y María Pinto, se llega a niveles de cloro de 250 partes por millón (ppm), indica el entrevistado. La tolerancia de un patrón de palto alcanza a 70 ppm y la de los nogales a unos 130 ppm. Fuera de rango, en ambos casos.
"Tenemos paltos en campos regados con aguas de los ríos Tinguiririca y Cachapoal, que logran rendimientos de 15 toneladas (t)/ha, en comparación a las 4-5 t/ha de las zonas afectadas si no haces nada para enfrentar el problema. Nosotros hemos ido incorporando mucha tecnología de cómo regar y además utilizamos plantas de osmosis inversa para disminuir el contenido de sales. Así nos situamos en alrededor de 10 t/ha, lo que es mejor pero no se trata de un gran rendimiento".
Capa satelital con resolución de árbol a árbol de estrés hídrico. Ricardo Ariztía insiste una y otra vez sobre la importancia de tomar decisiones a partir de números y datos confiables. La tecnología es vital en ese sentido.
Bajo las mismas condiciones edafoclimáticas e hídricas, los cítricos muestran una alta productividad en la experiencia de ATF Gestión: limones, 90 t/ha; naranja, 55 t/ha; mandarinas y clementinas, 40 a 50 t/ha. De hecho, la superficie de paltos está disminuyendo y la decisión actual se refiere a qué cítrico poner.
LOGROS IMPORTANTES, PERO SIEMPRE EXISTEN DESAFÍOS
"Trabajamos desde hace 40 años apoyados por el equipo técnico liderado por Francisco Gardiazábal, de Gama. Con él hemos ido desarrollando esta industria: la densidad a la cual plantamos, la poda, los portainjertos y variedades, ahí hay un trabajo continuo de investigación bastante profundo".
-¿Para ustedes cuáles son los mayores desafíos actuales en la producción de cítricos?
-"En mandarinas W. Murcott, lograr fruta sin semilla. Para todas las especies, un reto es cosechar un alto porcentaje de fruta exportable, porque no basta sacar 90 t/ha en limones, 50 en naranja y 40-50 en mandarina. La fruta que se queda acá, salvo el limón de verano, tiene retornos de 5 a 10 centavos, la diferencia es brutal. Se debe apuntar a un 80% de exportación. La curva de calibre también resulta importante en todos los casos; hay que tener un balance porque cuando el volumen se dispara, el calibre se viene abajo.
En limones la variedad Eureka presenta el mejor comportamiento en la producción de verano para mercado nacional.
La helada de mayo de 2022 afectó la producción de limón de verano de este año, dado que se produjo cuando estaban las flores que originan los frutos de enero-febrero.
"Los cítricos en general son comparativamente resistentes al frío, -2°C la naranja, -1°C el limón. Así y todo, hay zonas en que tienes que ir a protección. Nosotros contamos con sistemas de molinos de viento contra heladas".
-¿Cómo manejan el calibre?
-"Poda lo número 1, que regula la carga. Luego, tratamientos con productos. Y obviamente tener un árbol, un huerto fuerte, lo que implica fertilización, riego".
Un logro destacado por Ricardo Ariztía: cuando iniciaron la producción de mandarinas el objetivo se trazó para 30 t/ha. Un cambio conceptual en la poda, efectuada ahora en V para facilitar la entrada de luz, permitió pasar a 50 t/ha. Otro avance "quizá más importante" fue superar un aborto que ocurría en mayo-junio en los primeros huertos de mandarina; luego de muchas pruebas con varios productos, el problema quedó resuelto.
La cosecha de 400 hectáreas con un gran volumen de cítricos en otoño-invierno ha constituido otro desafío.
"Es muy distinto hacerlo en Ovalle, que no llueve. Acá tienes días con precipitaciones y muchas jornadas con neblina en que el rocío no permite cosechar. Comúnmente no se puede hacerlo en la mañana. La gente entra al huerto entre 12 y 1 de la tarde, en días cortos: a las 17.45 se acaba la luz. Se trabaja con muchas personas, unas 800, porque mientras un nortino puede sacar 1.200 kg/día, aquí llegan a 300-400 kg/día".
LOGRAR ALTOS NIVELES DE FRUTA EXPORTADA ES FUNDAMENTAL EN LOS RETORNOS
La mandarina se envía a EE.UU.; la naranja también fuertemente a EE.UU., aunque tiene otros espacios, por ejemplo en Asia; el limón, a Japón el de mejor calidad, también se comercializa en otros países del lejano oriente, Norteamérica y Europa.
Entregan fruta a distintas exportadoras. "Como todos los campos aportan un volumen grande, hay oportunidad de distribuir su producción en dos o tres empresas. Esto no apunta a llegar a distintos países (las exportadoras van más o menos donde mismo) sino a diversificar tolerancias de calidad, diversificar estrategias comerciales, diversificar riesgos", explica el gerente.
-¿A qué se refiere las diferencias en "tolerancias de calidad"?
-"El nivel de tolerancia a un problema como el russet, por ejemplo, o hasta qué tamaño te aceptan recibir fruta. Una mandarina chica en el mercado nacional retorna 5 centavos; en el extranjero vale 20. Algunas exportadoras se preocupan de entregar un buen retorno promedio y no reciben fruta de 20 centavos; otras tienen el foco en aprovechar al máximo, aunque el precio esté lejos de los US$0,60. Sí, 20 centavos es un precio malo, pero muchas veces mejor que el que voy a recibir si no exporto ese cítrico. Y a mí me importa el P x Q [el precio multiplicado por la cantidad], que en cítricos es súper relevante. Si la exportadora me trajo un estupendo retorno promedio, pero me dejó un calibre fuera… Si no lo vendí lo tengo que botar".
-¿Con ese criterio te bajan el porcentaje exportable?
-"Sí, por eso te digo, quédate con esta idea: el P x Q. Y el Q no es solo la cantidad de toneladas, sino el porcentaje de exportación".
-¿Cuál es tu meta como porcentaje de exportación?
-"Hay dos procesos: cuando cosechas, seleccionas un porcentaje de toda la fruta en el huerto para mandar a la exportadora; y luego viene el proceso de selección en el packing. Voy a darte el porcentaje sobre la totalidad de lo que produzco: 80% naranja, 85% mandarina/clementina, 60% limones. Pero, ojo, porque una parte de los limones no se cosecha para exportación, como te dije".
-¿Eso es el top, lo máximo, o lo que esperas como mínimo?
-"En escala de 1 a 7, eso es nota 6,3".
-¿Lo logras todos los años?
-"Este año no, porque la helada afectó muchísimo. La fruta se veía bien, pero tenía problemas internos. Sin embargo, diría que en la mayoría de las temporadas sí se logra".
EL NEGOCIO DE LOS INVERSIONISTAS ANTE LA FRÍA PLANILLA DE CÁLCULO
-¿Cuál es la reacción de los inversionistas ante imprevistos como el que describes?
-"El sector agro está lleno de variables que no manejas, como el clima. Esa es la razón por la cual los inversionistas no habían ingresado anteriormente. Sin embargo, los retornos de otro tipo de inversiones que ellos tienen han ido disminuyendo y por lo tanto el sector frutícola resulta una buena opción. Ahora, indudablemente es difícil reportar ante una fría planilla de cálculo que la proyección que decía 50 t/ha con 80% de exportación ya no va a ser así".
-¿El aumento del valor de la tierra compensa de alguna manera estas alzas y bajas anuales típicas del campo?
-"El cálculo se hace sobre la rentabilidad de un activo, en la cual se incluye tanto la producción como la plusvalía del activo. Por dicha razón los fundos se tasan anualmente. Por supuesto una de estas variables puede compensar a la otra en un momento dado. No obstante, cuando los cultivos están bajo fuerte presión, como ocurre con algunos de ellos en Chile, no vas a lograr el objetivo. Si la rentabilidad es 10%, por dar una cifra figurada, la plusvalía aporta 3 a 4% y el cultivo 6 a 7%. Si el cultivo se viene abajo, por más que la plusvalía mejore, no va a cubrir ese 6 a 7%.
-¿Cuánto interviene en estos valores el tipo de cambio?
-"Es la gran variable que ha ayudado en los últimos dos años. Al final vendemos en dólares. Recibir 900 pesos por dólar en vez de 750 significa un 20% más. Pero los costos también han subido".
Ricardo Ariztía remarca que materiales, servicios, fletes e insumos han sufrido un alza considerable, lo que no se refleja en el precio final de la fruta para el productor.
"Sin embargo, los cítricos, dentro de todas las especies, han sido los que más han logrado pasar esta situación económica de buena forma. Siguen con utilidad operacional positiva y también son capaces de pagar la inversión financiera o los créditos, lo que no ocurre con otros rubros, como la uva de mesa en muchos casos, por dar un ejemplo. Chile es un buen país productor de cítricos, está bien posicionado comercialmente, yo diría que la ventana chilena está firme".
Con todo lo dicho, el entrevistado manifiesta su optimismo respecto de las posibilidades del sector:
"Haciendo las adaptaciones, los fine tuning de especies, de variedades, yo tengo fe en el negocio frutícola. Lo que pasa es que es dinámico. Tuvimos hartos años en que nos fue bien; ahora no tanto, entonces hay que ajustarse a la nueva realidad".