Investigadores de la UMA han modificado el genoma del fruto para conseguir que perdure más tiempo sin reblandecerse tras la recolecta. En concreto, han desactivado un gen responsable de los cambios en la pared celular.
05-sep-2017
Científicos del grupo de investigación 'Mejora y Biotecnología de Especies Hortofrutícolas' de la Universidad de Málaga han aplicado técnicas biotecnológicas para retrasar la maduración de las fresas y han conseguido cultivar plantas cuyos frutos presentan una textura más duradera en la poscosecha.
Los investigadores han empleado ensayos in vitro basados en la modificación del genoma de la planta y han identificado el gen asociado a la pérdida de firmeza de la pared de las células del fruto, denominado FaPG1.Tras su localización, lo han 'silenciado' para retrasar la maduración de la fresa, sin afectar al tamaño, color y sabor del fruto, así como tampoco a los contenidos en azúcares o la acidez. Según estos expertos, el deterioro de las fresas en la poscosechaprovoca pérdidas de entre el 5 y el 25% de la producción.
José Ángel Mercado, investigador de la Universidad de Málaga y responsable de este estudio, indica que "La fresa se va ablandando y deteriorando mientras se recoge del campo y recorre la cadena de envasado" y además explica que "las pectinas, es decir, uno de los principales componentes de la pared celular presentes en los organismos vegetales, se van rompiendo en esta fase, de modo que se debilita la estructura de la pared y se favorece el crecimiento de patógenos en el fruto provocando su deterioro".
Con la desactivación de gen asociado FaPG1 las plantas son más resistentes
Para prolongar su conservación, los investigadores realizaron ensayos a escala nanométrica en el laboratorio y analizaron la estructura de las pectinas. Además, emplearon técnicas de cultivo in vitro con las variedades de fresa 'Chandler' y 'Camarosa'.
Los expertos testaron varios genes y comprobaron que la función de degradación de las pectinas durante la maduración la ejecuta el gen FaPG1. Una vez localizado, emplearon técnicas moleculares para aislar dicho gen y reintroducirlo de nuevo en el genoma de la planta, de esta forma, el gen se desactiva y deja de enviar la orden de romper la pared celular. La reintroducción del gen se realiza mediante la aplicación de una bacteria denominada Agrobacterium. Este patógeno lo integra en el genoma de la planta y una vez se ha fijado el cambio genético, se elimina con antibióticos.
Los responsables de esta investigación quieren ampliar estos estudios de mejora de especies hortofrutículas a otras especies como el aguacate y el olivo.
Acceder al artículo del SINC, "la ciencia es noticia"
Fuente
Paniagua, C.; Kirby, A.R.; Gunning, P.; Morris, V.; Matas, A.; Quesada, M.A.; Mercado, J. A.: 'Unravelling the nanostructure of strawberry fruit pectins by endo-polygalacturonase digestion and atomic force microscopy'. Food Chemistry. 1 de junio de 2017. Volumen 224. Páginas 270-279.
Fuente: THM