Analizar casos de emprendimiento innovativo, reflejado en clusters de innovación de agronegocios en Holanda y estudiar su aplicabilidad en el contexto chileno.

Conocer el desarrollo académico y empresarial de las condicionantes que favorecen los CI en agronegocios en Holanda y el nivel de interacción entre centros de investigación agrícolas, universidades, centros de emprendimiento, privados y cuantificar el impacto económico que estos CI reportan a la economía agrari; Analizar las condiciones de estímulo gubernamental en la formación de clusters de innovación en agronegocios.; Generar una monografía que se refiera a casos de éxito en la formación de clusters de innovación de agronegocios en Holanda y su ambiente de desarrollo de manera de replicarlo en Chil;

La innovación genera una poderosa fuerza que contribuye a la modernización y fortalecimiento de la agricultura en el mundo. Los mayores recursos financieros, materiales y humanos destinados a 1&0 en Chile permitirán a los diversos fondos de promoción de la innovación a mejorar la rentabilidad y competitividad del sector agrario nacional. Prueba de la constante preocupación sobre este punto en el último tiempo, ha sido el progresivo esfuerzo del Estado chileno, reflejado en el aumento de los fondos de investigación en ciencia y tecnología sectorial (Conicyt, 2001).Junto con elevar el gasto en I&D en la agricultura chilena, es necesario estudiar los 'factores críticos' de la I&D del sector, que permitan asegurar un crecimiento autónomo del mismo. En este punto sería menester encontrar 'el ambiente' que promueve el desarrollo de los agronegocios innovativos basados en el conocimiento.Es indudable que ha existido un progreso tecnológico en Chile. En especial , la agricultura chilena ha experimentado un cambio tecnológico significativo en las últimas tres décadas (Olavarría y Bravo-Ureta, 2000). Esta evolución tecnológica ha permitido sentar las bases de competitividad para una amplia gama de productos nacionales en los mercados mundiales. Sin embargo, existe un déficit de agroempresas o agronegocios basados en la tecnología y en el conocimiento, demostrando una diferencia con los países desarrollados. La pregunta relevante que hacen los responsables de las políticas públicas sectoriales, apunta a como es posible inducir el nacimiento y desarrollo deagronegocios innovativos basados en el conocimiento científico y tecnológico para asegurar un crecimiento sustentable equivalente al registrado en los países desarrollados.Los países desarrollados compiten por transformarse en sociedades basadas en el conocimiento, donde su industria con base agraria se caracteriza por estar en constante movimiento. Esto genera una continua innovación, tanto en productos y procesos necesarios para competir sostenidamente en los mercados mundiales. Varias ciudades en EE.UU., Canadá y Japón ven con interés la proximidad de centros de investigación y áreas de producción, pretendiendo desarrollar incubadoras de empresas o parques tecnológicos a futuro. Ejemplo: Tsuba (Japón), Silicon Valley, Route 128, Research Triangle Park (EE.UU.) (Rogers and Larsen, 1984; Botkin, 1986; Voyer, 1997).Si gran parte del esfuerzo de los países tales como políticas de investigación, fondos concursables, etc, se volcara en estimular la interacción de los distintos sectores involucrados (privados, públicos, universidades y centros de investigación) en los agronegocios innovativos, se podría entonces modelar y pronosticar una base lo suficientemente sustentable de desarrollo autónomo de los agronegocios nacionales.Aumentando la base científica y tecnológica empresarial y aplicando políticas selectivas de fomento a la innovación y al emprendimiento, se generarían en determinados sectores industriales (de base agrícola) una serie de detonantes del progreso tecnológico que verifiquen un crecimiento de la actividad económica sectorial.La formación de conglomerados de innovación, CI (innovation clusters) podrían ser fundamentales para el desarrollo económico del sector agrícola chileno. Estos se definen como la agrupación de firmas, centros de investigación, Universidades o inversionistas que trabajan en una proximidad física para crear nuevas tecnologías, productos yempresas. Los CI forman redes de relaciones en complejos contextos sociales donde la actividad colectiva industrial está basada en el conocimiento y el aprendizaje (Bortagaray y Tiffin, 2000).Se requiere que se ponga especial énfasis en el rol de factores intangibles tales como comunicación y cultura, y otros tangibles como mercados e infraestructura especializada.Es posible que en el país existan potenciales CI en vez de CI maduros. Quizás muchos de ellos estén basados en las limitantes de mercados,