Chile finaliza cosecha de clementinas con buena calidad y crecimiento en volumen, en un escenario de menor dinamismo en el mercado estadounidense. EE.UU. sigue siendo el principal destino, pese a precios 10% menores.
07-jul-2025
Fuente y Fotografía: Diario Frutícola
La cosecha 2025 de clementinas chilenas finalizó en la semana 26 con resultados mixtos: una destacada calidad de fruta y aumento del 32% en el volumen exportado, pero enfrentando una demanda más moderada en el mercado estadounidense, que sigue concentrando la casi totalidad de los envíos.
De acuerdo con el análisis del Departamento de Estudios de Decofrut, Chile exportó 61.978 toneladas de clementinas, superando ampliamente las 47.003 toneladas de la campaña 2024.
El crecimiento se explica por una buena productividad en campo y condiciones climáticas favorables, que permitieron fruta con buen calibre, coloración y una excelente relación sólidos solubles/acidez, lo que se tradujo en calidad destacada en destino.
Estados Unidos concentra el 98% de los envíos
El mercado estadounidense continúa como destino dominante, absorbiendo el 98% del total exportado. Sin embargo, el comportamiento comercial ha sido más desafiante que en temporadas anteriores. Según el informe, los precios promedios de soft citrus (incluidas clementinas y mandarinas) han mostrado una caída de 10% respecto al año pasado, lo que refleja una menor actividad de compra y mayor oferta desde el hemisferio sur.
El mercado en EE.UU. ha estado menos dinámico debido a la competencia creciente con fruta de Perú, Uruguay y Sudáfrica, cuyos volúmenes también coinciden en la misma ventana comercial, presionando los precios a la baja.
Clemenules y Oro Grande lideran la temporada
Entre las variedades exportadas, Clemenules representó el 47% del volumen total, con 28.858 toneladas, seguida por Oro Grande, con un 39% de participación (24.157 toneladas). Ambas mostraron crecimientos de 31% y 47% respectivamente respecto a 2024, consolidándose como las principales opciones varietales en esta especie.
En menor escala, también se exportaron Clemenluz, Oronules y otras variedades tradicionales, pero con participación mucho más acotada, lo que confirma la concentración en variedades de mayor rendimiento y adaptabilidad comercial.
En cuanto a la fruta chilena, el análisis destaca una muy buena condición general, con calibres mayoritariamente medianos a grandes, color parejo y firmeza adecuada. Esto ha permitido un buen desempeño postcosecha, aunque los retornos han sido más ajustados por el menor precio promedio.
Desde el sector exportador, se ha insistido en la importancia de diversificar mercados y anticipar ventanas de mayor competencia, así como en reforzar la promoción en destinos alternativos a Estados Unidos para suavizar la dependencia de un solo mercado.
Perspectivas y desafíos
El cierre de la cosecha de clementinas en Chile da paso a la campaña de mandarinas, también enmarcada en el grupo de soft citrus, y que enfrenta desafíos similares en cuanto a precios y competencia.
A futuro, el sector apunta a seguir mejorando en eficiencia productiva, manejo varietal y posicionamiento internacional, aprovechando la alta calidad reconocida de la fruta chilena, pero ajustando estrategias comerciales ante el cambiante panorama de la demanda global.