En España, los millennials son los principales consumidores de productos ecológicos u orgánicos y según indican los expertos, las perspectivas de crecimiento del sector vendrán de su mano, por lo que entender sus necesidades futuras de consumo será clave.
18-jun-2018
Así lo explicó a Efeagro el director especializado en agroalimentación ecológica Diego Roig, de Ecological.bio, quien detalla que en el resto del mundo también es este grupo de consumidores el que aglutina la mayor concentración de ventas ecológicas.
El sector presenta buenas perspectivas ya que en 2016 continuó con un aumento en las ventas de 12,5%, llegando hasta casi EUR 1.700 millones en 2016, mientras que las ventas del total de mercado de alimentos y bebidas mantuvieron un crecimiento plano.
En el caso de España, Roig recuerda que, según un estudio del Ministerio de Agricultura, en torno a un 30% de los consumidores de productos bio tienen menos de 35 años.
A su juicio, el esperado aumento del consumo por este tipo de usuarios vendrá dado por dos factores, como se detalla en el informe de Ecological.bio "El sector ecológico en España 2018", que toma como referencia los estudios más actualizados de Prodescon, GfK, Kantar o los internacionales de FiBL e Ifoam.
El primero, de acuerdo al citado informe, deriva de un previsible aumento de la renta disponible de estos consumidores, que según Roig: "Ya llevan en su ADN la compra de productos ecológicos, por lo que se espera que los continúen consumiendo".
Por otro lado, el hecho de que las próximas familias, jóvenes madres y padres, cuando tienen descendencia desarrollan nuevas actitudes, prioridades y motivaciones, que influirán en su comportamiento, porque buscan de forma activa productos más saludables y nutritivos.
Un estudio de 2017 de la Organic Trade Association (OTA) en Estados Unidos, país en el que los millennials también son los principales compradores de productos orgánicos, revela que el 25% ya son progenitores y en los próximos 10-15 años, el porcentaje será en torno al 80%.
Según Roig, los hábitos de consumo ecológicos de los millennials relacionan la estrategia de entrada de algunas multinacionales en el sector orgánico con su intención de atender ese mercado, con lanzamiento de productos dirigidos a jóvenes que buscan este tipo de productos.
De ahí que recalque que no hay que perder de vista a los millennials por su mayor concienciación hacia hábitos de compra y consumo más saludable, el hecho de ser los progenitores de los nuevos núcleos familiares y su previsible mayor renta disponible influirán positivamente en los datos de consumo nacionales.
Comentario
En diciembre de 2017, el jefe global de investigación en alimentos y agronegocios de Rabobank, Gilles Boumeester, dio una charla-desayuno para los nuevos talentos internos de RaboFinance en Chile cuyos asistentes tenían menos de 35 años, según lo publicado en la Revista del Campo de El Mercurio. El analista está interesado en los jóvenes como ellos, los millenials, quienes representan un 48% de la población chilena. La presentación estuvo enfocada en las innovaciones y cambios que vienen para los agronegocios.
Según Boumeester, el incremento de las compras online marcará un cambio en el consumo de alimentos, lo que generará más información sobre el perfil de cada cliente para hacer ofertas personalizadas y un mayor interés de los consumidores por conocer el origen de los productos. Con el aumento de las compras por internet, el retail online tiene información precisa de cada cliente, lo que permite afinar las ofertas para cada persona. "Hoy sabemos que los chinos comen muchas cerezas para el Año Nuevo, porque es una costumbre que podemos ver. Pero con los datos que vamos a tener se van a conocer otras demandas específicas y si logramos predecirla, el paso siguiente será preguntar a los agricultores si pueden producir ese producto para un momento específico", explicó.
Asociado a ello, viene una preocupación por la salud y el medio ambiente, lo que implicará una mayor conexión del consumidor final con los agricultores, más preocupación por el manejo de los residuos en toda la cadena y una mayor relevancia del origen y trazabilidad de cada producto.
Otro desafío del sector según Boumeester, es reducir las pérdidas y residuos a lo largo de la cadena, algo que es una preocupación creciente en los países desarrollados.
"Es importante saber de qué manera un productor trabaja con la basura, porque la gente va a mirar eso y para reducirlo se requiere cambiar embalajes, variedades y la forma de trabajar", planteó Boumeester.
Fuente: Agrimundo