Documento OCDE “Revisión de Políticas de Transformación Productiva de Chile”

El informe recomienda con claridad avanzar hacia una actualización del modelo para continuar su desarrollo hacia la diversificación y sofisticación productiva.

Sobre la minería, por ejemplo, el documento enfatiza que el sector enfrenta límites en términos de su capacidad futura para generar empleos, dado el movimiento hacia la minería automatizada.

Si bien considera que el ámbito extractivo va a seguir siendo un factor clave de crecimiento, debe enfrentar su creciente intensidad de consumo energético, ya que representa el 20% del consumo total de energía doméstica en Chile.

En ese sentido, el informe de la Ocde subraya el "vigoroso despliegue" de la industria solar, señalando que están dadas las condiciones para el desarrollo de una industria de gran escala, pero que también es necesario abordar tempranamente los desafíos tecnológicos vinculados a la adecuación de las actuales soluciones de alta radiación del Norte de Chile.

Los aspectos que destaca el reporte son de gran importancia si se considera que Chile ha optado por una constante integración comercial internacional. Ante ello, la Ocde recomienda como "primordial" una estructura exportadora más diversificada, que deje atrás el actual patrón basado en la explotación de recursos naturales

En torno a la agricultura y la industria agroalimentaria, en tanto, el informe señala que que el país exporta principalmente productos primarios para el consumo. Así y todo, el 8% del PIB de Chile y contribuyen sobre el 20% de las exportaciones nacionales y el 17% de la fuerza laboral.

Un aspecto preocupante que señala el documento es la baja especialización y preparación de los chilenos en áreas relevantes para la competitividad del país. Se enfatiza que solo el 3% de los graduados lo ha hecho en el área TIC, mientras que el 1% en ciencias naturales, matemáticas y estadística. Es decir, la más baja participación de todos los países del organismo.

En ese sentido, el reporte indica que aún es baja la inversión púbica y privada en innovación. Con un gasto aproximado de US$1,2 mil millones en investigación y desarrollo (0.39% del PIB), Chile e ubica lejano a lo que ocurre en los otros países de la Ocde.

El texto señala que "con 33% del gasto total en I + D, la contribución del sector privado es significativamente inferior a los otros países del organismo, cuyo promedio es cercano al 68%".

Tomando en cuenta los aspectos que destaca el documento es que desde el año 2014 se llevan adelante en Chile los Programas Estratégicos de Especialización Inteligente (PEEI), "Transforma", que tienen el objetivo de contribuir a mejorar la competitividad en ámbitos donde existe alto potencial de generación de valor o crecimiento.

Esta dinámica se desarrolla con el claro objetivo de pasar de una economía basada en los recursos naturales a una basada en el conocimiento, donde las actividades económicas sean capaces de producir nuevos bienes y servicios, favoreciendo el desarrollo industrial y la generación de polos de innovación y emprendimiento regionales.

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Fuente: Innovacion.cl