La Fundación para la Innovación Agraria (FIA) junto al Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) finalizaron un proyecto que estableció las bases técnicas para obtener la denominación de origen, la cual ambas instituciones esperan obtener el 2018.
El pepino dulce es una fruta típica de la IV región y allí es donde se concentra el 80% de su producción, razón que llevó hace tres años a crear un proyecto de innovación para agregarle valor a este fruto y que a su vez, buscaba encontrar factores diferenciadores en la variedad producida en los Cerrillos de Tamaya respecto a los cultivados en Valparaíso. Portalfruticola.com conversó con René Martorell, ejecutivo de innovación de FIA sobre esta iniciativa, quien indicó que el proyecto finalizó y se encuentra en la etapa de elaboración de conclusiones administrativas pero que ya se lograron establecer normas técnicas para la producción de este fruto. Martorell indicó que el proyecto buscaba reconocer los factores del territorio que influían en las características del fruto, para así lograr una indicación geográfica que permitiera valorizar el producto. Asimismo, explicó que lo anterior se enmarca en la línea de trabajo de FIA llamada "Valorización del patrimonio", la cual busca un sello diferenciador o una denominación de origen, basándose en la historia de los productores y el territorio donde se cultivan ciertos frutos, lo cual permite que tengan mayor valor y demanda en el mercado.
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