El creciente panorama que ha provocado la agricultura orgánica, en los últimos años, que surge cómo un proceso sostenible y sustentable en armonía con la ecología, a partir de principios de protección de la calidad del suelo, en equilibrio con el medio ambiente, en un entorno de producción que no depaupere el suelo cultivable, ni la toxicidad del fruto obtenido, por la aplicación de agro tóxicos. En esa necesidad real del ser humano de alimentarse de productos sanos, necesitamos adoptar un sistema de sustitución de insumos de vida, que permita el aprovechamiento integral de lo natural.
08-dic-2020
Fuente: Mundo Agropecuario
Autor: César Tranquilli para Mundo Agropecuario
La práctica agrícola, es una modificación del estatus natural de los ecosistemas, a pesar que a lo largo de la historia ha servido, para configurar la realidad rural y ha ido mutando, de forma física y biológica el medio ambiente.
Se puede Inferir una convergencia, entre la noción de la puesta en práctica del desarrollo rural sostenible y algunas de las nociones claves de la Agricultura orgánica ó ecológica, un concepto taxativo, aparece introducido en esta reflexión, es la sostenibilidad que va a actuar cómo puente de unión, entre la Agricultura Orgánica y el Desarrollo Rural.
La Agricultura Orgánica, integra prácticas de manejo de cultivos, evitando el uso de agro químicos, es en la Agricultura ecológica donde se engloba, la gestión de la producción, donde se fomenta la actividad de los agro-ecosistemas y reproductividad biológica de los suelos, se estima así que el mercado de productos orgánicos, mueve más de 51 MM USD anuales.
La gran mayoría de Agricultores en países en vías de desarrollo son pobres y se encuentran marginados de los mercados de insumos y productos con valor agregado, aproximadamente 800 Millones de personas continúan padeciendo hambre, cómo consecuencia surge un cuestionamiento importante, acerca de hasta que punto los agricultores, pueden mejorar la producción doméstica de alimentos, por medio de tecnologías e insumos, de bajo coste, muchas de producción manual y que se encuentren disponibles localmente.
Es imprescindible establecer, nuevas estrategias para el desarrollo sostenible y productivo del agro, apoyado en las fortalezas y oportunidades que brinda la fertilización orgánica, reconociendo la existencia de un conjunto de acciones e interacciones, que conviene explorar para buscar formas de concertación y articulación equitativas, con los agentes foráneos de la Agricultura.
Lo relevante al interior de la fertilización orgánica, es su producción cien por cien natural, los fertilizantes orgánicos brindan, mayores beneficios y son altamente efectivos, siendo un proceso natural que implica, una solución estratégica y ambientalmente aceptable, brindando una verdadera reproducción de la producción, la Agricultura Orgánica per se, es una tecnología no sólo alternativa, sino de aseguramiento productivo en el largo plazo, además de ser respetuosa con el medio ambiente y con costes de producción menor, conforme avanzan las cosechas en su discurrir.
Uno de los objetivos principales de la Agricultura Orgánica, ha consistido en fertilizar de forma natural, para conservar y seleccionar, recursos filogenéticos, en peligro de extinción.
El desarrollo rural debe tener en cuenta, la cultura tradicional local, ya que el medio rural es indisociable de su cultura propia, las acciones de desarrollo rural, interactúan de manera participativa y su objetivo primordial siempre debe ser, el mejoramiento de la calidad de vida, del sector rural, cuyas comunidades humanas, abarcan casi la mitad de la población mundial.
La Agricultura Orgánica rescata prácticas de producción, aunque no descarta los avances tecnológicos, un modelo que no necesita de insumos externos, de manera simultánea interrelaciona la salud del hombre y del suelo, cómo vínculo indisoluble basado en lo natural, ponderando la armonía de la prosperidad que puede ser alcanzada; preservando los ecosistemas.